Hotel Abades Loja - Loja, Granada

Mayte V. M.

Fui con mi pareja y NO REPETIRÍAMOS.
Estuvimos 2 noches y hasta los trabajadores se sorprendieron de que estuviéramos varios días.
Nos dan una habitación de dos camas juntas y son plegables, nos cambiaron a una d matrimonio y las patas del somier NO tocaban el suelo algunas. No nos dieron solución ninguna. Las sábanas, sobretodo la bajera, no era del tamaño correcto y era tumbarte y tener la cama desecha. Dormías al final con medio cuerpo sobre el colchón sin sábana ni funda d colchon. Por no hablar de que SE ESCUCHA TODO, nos levantaban las limpiadoras gritando por los pasillos.

Pasamos al baño, todo muy bajito, mi pareja que mide dos metros chocaba con la ventana, el pasillo al entrar al baño estrecho y el lavabo muy bajo. Eso por no hablar de la bañera, suelo resbaladizo sin adherencia ninguna, UN PELIGRO. Y con cortina d separación, cosa muy ANTIHIGIÉNICA teniendo en cuenta que se pega al cuerpo mientras t duchas y estamos en un sitio donde los cuerpos cambian...

MENU POCO VARIADO Y SIN SABOR. Unos simples macarrones lo cocieron, tomate d bote muy líquido y listo. Comida repetitiva, sin calidad, muy cara para lo que es. Pagamos el menú completo y me dejaron sin primer plato. No me dieron soluciones cuando encima fue error suyo. El pan que sobraba del almuerzo era el de la cena, y estaba duro de tenerlo todo el día ahí. Igual que el menú, LO QUE SOBRA DEL ALMUERZO ES LO QUE CENAS ese día. Por no hablar del postre, dulces secos, pastosos y de tres días por lo menos. Lo único bueno fue la sopa (que si no preguntamos si había algo suave para la cena ni nos dicen que hay), y el desayuno (simplemente, café y tostada).

Elizabeth L. M.

Habitaciones muy limpias amplias y confortables.
Esta un poco antiguo pero cumplen con todo lo que necesitas para una noche de paso. El personal muy atento y amable. Merece la pena la media pensión, en mi caso cena y desayuno. Gracias a José y Cristina recepcionistas .

Yasmina B.

Mi sitio favorito de confort para parar en los viajes!! Tiene menús riquísimos de comida con primer, segundo plato, postre casero y bebida... y es muy completo tiene todo tipo de productos. Da igual en qué carretera te encuentres, te hará sentir cerca de casa

Pedro G. R.

Se metió a la cocina donde hay cristaleras y viéndolo todas las personas de la fila montó un bocadillo de pechugas de pollo y pimientos con sus deditos al aire, aparte de que los platos de donde cogió los ingredientes estaban también sin tapar al aire. Luego en barra siguió montando un bocadillo de queso como de fundir con sus dedos también. Los otros camareros hombre y mujer de igual forma. Excepto un chico joven y deduzco que sería nuevo que ése sí que tenía sus guantes azules entiendo homologados para alimentación puestos. Se lo digo al encargado y me dice que eso es así y que solo están tocando los alimentos... Imagino que luego cuando salga a echar su cigarro si fuma con sus mismas manos tocará de nuevo los alimentos. Casi devuelvo el desayuno de mi propia casa viendo eso. En fin un horror. Al encargado le dije que pondría la reseña en Google muy gustoso. Un saludo.

noe Z.

Trato pésimo, pedí un vaso para cambiar el Colacao de los niños q estaba muy caliente y la camarera q estaba en una barra, Rocío, me dijo q estaba cerrada su barra y no me podía atender, cuando tenía detrás los vasos y solo era cogerlo. En ningún momento hizo por atenderme sólo se limitó a decir estoy cerrado, estoy cerrado cada vez q le hablaba. Pocas ganas de atender a la clientela es lo q tenía cuando abrió la barra a los 10 minutos

Noemi M. P.

Gran experiencia trato muy bueno habitaciones muy confortables desayuno y comidas todo genial trato excelente por todo el personal del hotel desde recepción limpieza cafetería volveremos a repetir y excelente para perros muy bien y zona muy bonita.
Alexis Noemí h.125 gracias

fatima D.

Las instalaciones perfectas, las habitaciones no faltan detalles, todo super limpio... no falta detalle, comida de menú no te daban opción a elegir, pero gracias a 2 chicas (Rosario y Jenifer) no me quede sin comer, porque si fuera por otros compañeros superiores o comia a la carta o no comias, la verdad que el personal deja mucho que desear, pero gracias a qué hay excepciones como la de esas 2 chicas que hacen que se te quite un poco el sabor amargo.

Kevin M. C.

Parar en este área de servicio fue todo un acierto. Desde el primer momento, el trato fue inmejorable. El camarero no solo fue amable, sino que se ofreció a llevarnos los bocadillos a la mesa, lo cual es un detalle que marca la diferencia. Por su parte, el chico de la caja también nos atendió con mucha cordialidad y eficiencia.

Un gran plus es que nuestra mascota pudo entrar con nosotros, lo cual valoramos muchísimo, ya que no siempre es fácil encontrar lugares pet-friendly en carretera.

Y, por supuesto, los bocadillos… ¡riquísimos! La calidad y el sabor nos conquistaron. Sin duda, cada vez que pasemos por esta ruta, volveremos a parar aquí. ¡Recomendadísimo!